3 de febrero de 2016

EL ARMA SECRETA DE PEDRO SÁNCHEZ






Una vez que el rey Felipe VI ha encargado formar gobierno al SG de los socialistas Pedro Sánchez, se abre una nueva fase política en la que las cartas de juego deben ponerse sobre la mesa. Parece que la baraja está repartida pues al fin y al cabo tenemos 350 naipes y cada partido ha recibido los que le corresponden. Parece existir un equilibrio inestable, un empate casi aritmético, entre las fuerzas de centro derecha y las de centro izquierda y que las normas de juego dictadas por los jugadores principales tratan de impedir que los terceros en discordia, las minorías nacionalistas, puedan desbloquear ese empate. Alguna otra vez lo han hecho en legislaturas del régimen constitucional del 78 pero ahora parece que no toca. Tiene lógica de alguna manera. Los nacionalistas catalanes devenidos en independentistas se ven devotamente obligados a mantener la ficción de situarse al margen del sistema. Si ellos n quieren comer y los demás no estiman ofrecerles un plato pues parece que la situación es normal. Lo normal sería la transacción entre unos y otros pero eso parece un argumento de sentido común no una obligación política para nadie.

Por otra parte tenemos el veto natural y mutuo entre PP y PSOE. Esto ya es ciencia matemática por mucho que se empeñen algunos en pensar que al final llegarán a un acuerdo de no obstaculización tal como piensan personajes como Felipe González. Han cruzado el Rubicón y ya no hay vuelta atrás. Pedro se ha zafado de la presión de sus barones y a Mariano no hay nadie dentro del PP capaz de quitárselo de en medio.

Aceptado esto digamos que la fórmula de gobierno solo puede salir por la suma o coalición activa, pasiva o mediopensionista entre PSOE, Podemos y Ciudadanos. Estas fuerzas disponen de doscientos escaños, que no está mal.

Ciudadanos, una vez que el PP ha decidido renunciar a formar gobierno, no tiene más remedio que intentar que el PSOE sí que lo pueda intentar. Todo el mundo piensa, simplemente por vaguería intelectual más que por otra cosa, que los chicos y chicas de Rivera no están interesados en la repetición electoral. Demos por bueno el argumento y supongamos que su interés sea ayudar, entonces, al PSOE en la tarea. Querrán impedir que Podemos condicione la formación del nuevo gobierno. Siempre han dicho que no votarían al PSOE en el caso de una coalición que diese entrada en el mismo a los de Podemos y las mareas. Y de alguna forma, por contraposición, tampoco intentarán coaligarse con el PSOE para evitar un veto a la investidura de naturaleza simétrica por parte de Podemos.

Podemos está en las mismas que Ciudadanos. No puede imponer o no va a poder imponer, esto como comprenderán son pronósticos solamente pues puede pasar cualquier otra cosa, un gobierno neto de izquierdas. Los argumentos que utilice el PS- eso que esta ya diciendo de gobierno progresista y reformista- forzarán la presencia, activa o pasiva de Ciudadanos en la fórmula y la imposibilidad de hacerlo con un gobierno de ese perfil. Otra cosa es que Podemos entre en el juego. En el caso de Podemos todos tendemos a pensar que sí que están interesados en la segunda vuelta electoral. Eso es otra prueba de nuestra pereza mental. Nadie sabe lo que puede pasar y en estos casos funciona aquello de virgencita que me quede como estoy.

¿Cómo atamos a la mosca por el rabo? Esa es la pregunta del millón. Pues la respuesta está en el aire. Primero, diseñando un programa de gobierno lo suficientemente abierto como para merecer el apoyo tanto de Ciudadanos como Podemos ¿Imposible dice usted? Más imposible que en su momento fue diseñar la Constitución del 78 y firmar los Pactos de la Moncloa no lo creo. La dificultad ahora es la desconfianza mutua entre las tres fuerzas y su miedo a superar sus propias zonas de confort. No puede ser un proyecto de más alcance que el de colocar al país en un nuevo marco institucional- reformas constitucionales, electorales, jurisdiccionales, territoriales- que pueda permitir en un próximo futuro acomodar cualquiera de las aspiraciones particulares de las partes. Por lo tanto, un proyecto reformista. No puede ser tampoco un plan que no permita ganarse el favor de las clases medias y de los sectores más perjudicados por la crisis. Ello le obliga a tener matices y designios de raíz social igualitaria en materias salariales, laborales, educación, sanidad, etc.

Diréis, que fácil lo ves chaval, gracias por lo de chaval. No es fácil no. Lo comprendo. Pero por ello uno se ve obligado a estrujarse las meninges. Y se me ha ocurrido una forma de eliminar suspicacias entre las partes. Ya que un gobierno de coalición entre las tres partes o dos de ellas solamente que para el caso es igual ¿Por qué no intentar una versión de gobierno extrapartidario? Un gobierno encabezado por Sánchez pero formado por personalidades no directamente vinculadas a los partidos. De hecho ya se lleva comentando desde el principio del baile la posibilidad de nombramiento de un presidente foráneo al sistema de los partidos, al estilo de Monti en Italia en su momento, para desatascar el impasse. Mi idea es una variante de esa propuesta solo que pensada para que los independientes sean los ministros y no el presidente del gobierno. Eso sería una forma de coexistencia de la fórmula del gobierno de independientes “fuera de toda sospecha” con la preeminencia del sistema de partidos.

En resumen, un gobierno con un proyecto reformista y progresista y con una composición suprapartidaria que ofrezca garantía a las partes promotoras sin desdoro de su propia personalidad. En ese equipo ministerial entrarían personas que contasen con el beneplácito lo más amplio posible de los partidos y de la sociedad civil.

Ahora no me pidan ustedes nombres. Eso ya lo dejo para ustedes. Piensen. Si en nuestra sociedad civil no somos capaces de encontrar personas con ese perfil, en esa sintonía reformista y progresista, pues entonces será que no nos merecemos ese gobierno tan bonito.

Si alguno conoce a Pedro Sánchez que le mande este papel. A lo mejor a él no se le ocurren estas chorradas de arbitrista español de toda la vida.


No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...