25 de abril de 2006

Tranquilos:solo es un experimento


Me dicen que los blogs mas visitados son los que contienen material tóxico sensual. No tengo ni idea pero como todo esto es gratis vamos a comprobarlo. El otro dia paseando con mi vieja cámara por las cercanias del Palacio Real de Madrid me encontré debidamente colocada sobre una hornacina, bien que no sagrada, este pasquin, o flyer como dicen los entendidos, que anuncia actividades musicales o teatreras con cierto contenido irreverente, máxime estando por esas fechas en plena Semana Santa. Realmente no conozco los productos artisticos que promociona la gentil hermana del tocado monjil. Pero me parece un homenaje a los famosos calendarios de camionero de los años 60 y 70 que tanto despreciabamos entonces. No se si la juventud de hoy es mas irreverente que la de aquellos años o que sus gustos estéticos son menos exigentes que los nuestros. Por cierto que a pocos metros de donde tomé la foto se encuentra la estatua de Sor Juana Inés de la Cruz, la insigne y maravillosa poeta mexicana de quien recordamos a propósito de esta foto aquellos versos de "quererlas cual las haceis o hacerlas cual las quereis" o así.
Ya os contaré como va la cosa y si es cierta la leyenda urbana de que el destape abre las puertas al éxito en la blogosfera. Posted by Picasa

17 de abril de 2006

Festival de Cine en el desierto. Crónica de un viaje

Fotografía y artículo de Lucía Taboada


¡Hola a todos!
¿Cómo estáis?
Como mandé unas cuantas fotos del Tercer Festival de Cine celebrado en los campamentos de refugiados saharauis en Argelia este mes de Abril, me piden que escriba algo contando en qué consiste. Intentaré explicarlo como pueda.

Este festival es una iniciativa creada por las Asociaciones de Amigos del Pueblo de España en coordinación con el Gobierno Saharaui.
El objetivo es llevar el cine al alcance de los saharauis que llevan 30 años refugiados en el desierto argelino ya que en 1976 España abandonó los territorios que conformaban su antigua colonia del Sahara Occidental permitiendo la invasión militar del territorio saharaui por parte del Reino de Marruecos. A partir de ese año, viven esperando a que se celebre un Referéndum para decidir libremente su futuro y poder volver a su país.
En este tiempo, unos 200.000 saharauis viven en condiciones precarias en la zona más inhóspita del desierto. Han construido hospitales, escuelas, se han organizado a pesar de la escasez de luz eléctrica, agua y alimentos, todo ello contando con la ayuda internacional.

El festival lleva películas internacionales a los campamentos y junto a ellas vienen directores/as, actores, actrices, escritores/as, periodistas, etc … dispuestos a conocer y convivir con los saharauis durante unos días.
Este año se han proyectado más de 20 películas, entre ellas,'La vida secreta de las palabras', 'Habana Blues', `Fresa y Chocolate´, 'Guantanamera', `Para que no me olvides´, `Heremakono”, y los documentales 'Invierno en Bagdad', 'La historia del camello que llora' o 'La pesadilla de Darwin'.También varias infantiles como `Shrek´o `El sueño de una noche de San Juan´.
En mi caso, he tenido la suerte de poder viajar desde el año 1998, esta era mi sexta vez y he asistido a los tres festivales que se han hecho. Lo que más me impresiona al estar allí, es la gente, son los saharauis, desde los niños hasta los más mayores. Es difícil decirlo de palabra. Ellos son amables y hospitalarios, te ofrecen todo lo que tienen y lo más contradictorio, es que no tienen casi nada.
Los niños siempre están alegres y con ganas de jugar.
Cuando llegas, te alojas en familias, directamente en sus jaimas y casas de adobe. Allí, pasas los días y ellos en seguida se convierten en tu familia creándose un vínculo de mucho cariño y afecto.
Yo, en todos mis viajes, he estado en familias diferentes, desconocidas en un primer momento; y en todas me he sentido encantada.

Sobre el festival, tengo que decir que es muy bonito ver una pantalla enorme, en medio del desierto, donde se proyectan películas en 35 mm y todo el público sentado por allí, disfrutando del cine. Estuve un rato viendo Shrek con los niños y se les veía encantados viendo a ese ogro verde que hacia cosas divertidas; se morían de risa.
Las pelis se subtitulan al árabe para que lo entienda todo el mundo, aunque hay muchos saharauis que hablan español.
También, se han creado pequeños talleres, cursos de formación audiovisual y videotecas en cada campamento.
El premio del festival es una camella blanca, símbolo de la paz para el pueblo saharaui. Este año, ganó el documental 'La historia del camello que llora´.
Además, en este viaje, asistió el escritor uruguayo Eduardo Galeano, que dio una conferencia en el acto de clausura muy emocionante.

Creo que he contado mas o menos de qué va esto, yo os animo al que pueda, a viajar a los campamentos y a ver si algún día podemos ir al Sahara Occidental , a disfrutar con los saharauis de las tierras que fueron y han sido siempre suyas.

Muchos besos a todos,
Lucía.
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13 de abril de 2006

Memoria del futuro. Homenaje a la II República Española 1931-1939

Ilustración de Ana Juan

Manifiesto "Con orgullo, con modestia y con gratitud"

El 14 de abril de 1931, España tuvo una oportunidad. La proclamación de la II República Española encarnó el sueño de un país capaz de ser mejor que sí mismo, y reunió en un solo esfuerzo a todos los españoles que aspiraban a un porvenir de democracia y de modernidad, de libertad y de justicia, de educación y de progreso, de igualdad y de derechos universales para todos sus conciudadanos. Hoy, setenta y cinco años después, los firmantes de este manifiesto evocamos aquel espíritu con orgullo, con modestia y con gratitud, y reivindicamos como propios los valores del republicanismo español, que siguen vigentes como símbolos de un país mejor, más libre y más justo.

Frente al colosal impulso modernizador y democratizador que acometieron las instituciones republicanas -siempre con la desleal oposición de quienes creían, y siguen creyendo, que este país es de su exclusiva propiedad-, todavía se nos sigue intentando convencer de que la II República fue un bello propósito condenado al fracaso desde antes de nacer por sus propios errores y carencias. Los firmantes de este manifiesto rechazamos radicalmente esta interpretación, que sólo pretende absolver al general Franco de la responsabilidad del golpe de estado que interrumpió la legalidad constitucional y democrática de una república sostenida por la voluntad mayoritaria del pueblo español, con las trágicas consecuencias que todos conocemos. Y exigimos que las instituciones de la actual democracia española rompan de manera definitiva los lazos que la siguen uniendo -desde los callejeros de los municipios hasta los contenidos de los libros de texto- con un estado ilegítimo, que surgió de una agresión feroz contra sus propios ciudadanos y se sostuvo en el poder durante treinta y siete años mediante el abuso sistemático e indiscriminado de los siniestros recursos que caracterizan la pervivencia de los regímenes totalitarios. Después de treinta años de democracia, resulta vergonzoso tener que recordar aún donde estaba la ley y donde estuvo el delito. A estas alturas, es intolerable, y muy peligroso para la salud moral y política de nuestro país, que todavía se pretenda equiparar al gobierno legítimo de una nación democrática con la facción militar que se sublevó contra el estado al que, por su honor, había jurado defender, y cuya victoria sólo fue posible gracias a la ayuda de los regímenes fascista y nazi que preparaban una invasión de Europa que acabaría provocando una guerra mundial y, aún más decisivamente, gracias a la culpable indiferencia de las democracias occidentales, que, antes de convertirse en víctimas de las mismas potencias en cuyas manos habían abandonado a España, eligieron parapetarse tras el hipócrita simulacro de neutralidad que representó el comité de No Intervención de Londres.

El 14 de abril de 1931, España tuvo una oportunidad, y los españoles la aprovecharon. Pese a la brevedad de su vida, la II República desarrolló en múltiples campos de la vida pública una labor ingente, que asombró al mundo y situó a nuestro país en la vanguardia social y cultural. Entre sus logros, bastaría citar la reforma agraria, el sufragio femenino, los avances en materia legislativa de toda índole, la separación efectiva de poderes, las constantes y modernísimas iniciativas destinadas a difundir la cultura hasta en las comarcas más remotas, el decidido impulso de la investigación científica o el florecimiento ejemplar no sólo de la educación, sino también de la asistencia sanitaria pública, para demostrar que aquel bello propósito generó bellísimas realidades, que habrían sido capaces de cambiar la vida de un pueblo condenado a la pobreza, la sumisión y la ignorancia por los mismos poderes -los grandes propietarios, la facción más reaccionaria del Ejército y la jerarquía de la Iglesia Católica- que se apresuraron a mutilarlo de toda esperanza.

La República dotó a los sectores más débiles y desprotegidos de la sociedad de entonces, las mujeres y los niños, de un estatuto jurídico privilegiado en su época. El retroceso fue tan brutal, que el cambio de régimen supuso para ellas, para ellos, la pérdida de todo derecho y su consagración como subciudadanos dependientes de la buena voluntad de los cabezas de sus respectivas familias. La República apostó por la defensa de los espacios públicos como escenario fundamental de la vida española, asumiendo la necesidad de equiparar las condiciones de vida de las poblaciones rurales y urbanas, y desarrollando políticas de igualdad no sólo entre los individuos, sino también entre las regiones más y menos prósperas. El retroceso fue tan brutal, que el cambio de régimen consolidó las desigualdades históricas tanto individuales como colectivas, y abandonó la promoción de los servicios públicos para crear un déficit que en algunos sectores, como la educación primaria y secundaria, seguimos padeciendo todavía. La República fomentó el auge de la cultura española en todos los terrenos de la creación artística y de la investigación científica, el debate intelectual y la vida universitaria, hasta el punto de que su nombre y su destino estarán unidos para siempre a la memoria del máximo esplendor cultural del que ha gozado nuestro país en la era moderna. El retroceso fue tan brutal, que el cambio de régimen supuso la pérdida más trágica que, a su vez, ha soportado nunca la cultura española, el exilio masivo de los mejores, que dejaron las aulas y los laboratorios, los talleres y las redacciones, las editoriales y los museos, la autoridad y el prestigio intelectual de nuestro país, en manos de una improvisada cosecha de oportunistas y segundones, que redujeron la vida cultural española a una lamentable manifestación de mediocres oscuridades.

Hoy, setenta y cinco años después, los firmantes de este manifiesto no queremos seguir lamentando la triste brutalidad de aquel retroceso, sino celebrar la emocionante calidad de los logros que le precedieron, y agradecer la ambición, el coraje, el talento y la entrega de una generación de españoles que creyó en nosotros al creer en el futuro de su país. Reivindicar su memoria es creer en nuestro propio futuro, que será proporcionalmente mejor, más libre, más justo, más feliz, en la medida en que seamos capaces de estar a la altura de la tradición republicana que hemos heredado. Por una España verdaderamente moderna, laica, culta, igualitaria, por su definitiva normalización democrática, y por el progreso armónico del bienestar de todos sus ciudadanos, hoy, setenta y cinco años después, queremos celebrar el 14 de abril de 1931, y proponer que esta fecha se celebre en lo sucesivo como un reconocimiento oficial a todos los ciudadanos españoles que lucharon activamente por la libertad, la justicia y la igualdad, valores comunes que tienen que seguir orientando la construcción democrática de la sociedad española.

Abril 2006

Lee el manifiesto y fírmalo

6 de abril de 2006

Homeopatía


Doctores Federico Ortega, Alejandro Fernandez….

Si el principio de las pequeñas dosis homeopáticas pudiera ser aplicado al método histórico, de la foto de arriba concluiríamos rápidamente con la historia de la homeopatía en España. Esta pared con un cuadro médico se encuentra en el Hospital Homeopático de San José, en la calle de Eloy Gonzalo de Madrid.

Desde 1845 está acreditada la práctica homeopática en Madrid y el hospital de San José, abierto en 1876, marca el punto álgido de la influencia de esta escuela.

La Sociedad Hahnemanniana Matritense fue la pionera en España en dar forma corporativa a los practicantes del arte. Su empeño en la formación y en la homologación de los médicos homeópatas les llevó a alcanzar cierta influencia en la medicina española de la época. Hasta que la medicina tradicional no alcanzase cierta mayoría de edad muy a finales del siglo XIX y el descubrimiento de las prácticas asépticas y de salud pública y, mas tarde, de los antibióticos es conocido que la homeopatía competía y mejoraba los resultados de las técnicas tradicionales. Aunque solo fuese por el efecto placebo y la escasa inocuidad de los fármacos homeopáticos en contraposición con las barbaridades terapéuticas de la medicina tradicional de aquellos tiempos.

Hoy el Hospital de San José- www.homeoint.org/site/sanjose/index.htm - tiene pendiente una reforma global y se desconoce en que medida se volverá a recuperar la práctica homeopática en sus futuras instalaciones. La medicina tradicional se ha olvidado tanto del paciente y se ha hecho tan tecnológica y fría que asistimos a un revival de las prácticas médicas alternativas. Puede que la homeopatía se beneficie de ello.

En cualquier caso cuando paseamos por lo que entonces los vecinos llamaron el “hospitalillo de la Habana” nos viene a la memoria el trabajo de una generación de médicos que entregaron su vida al servicio de sus semejantes.

ACTUALIZACIÓN

En Febrero de 2008 se están terminando las obras de restauración de este antiguo edificio del barrio de Chamberí de Madrid. Si quiere conocer detalles de esa obra y de alguno que otro dislate pásese por la entrada que acabo de escribir.
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