Tristeza, hoy no voy a recibirte
Por las horas tristes de la noche
cuando uno solo es un verso de Virgilio
o un poema de Keats apenas recordado.
Cuando en la paz recogida del silencio de las fuentes
piensas que el mundo es un espanto.
Entonces, si, entonces vienes obligado
a convertir los rayos de amargura
en un trueno de paz que reconforte.
A guardar para mañana
la lumbre ya asfixiada de una primavera lejana.
Eso que eres tú es un tesoro guardado en la caja fuerte
de los afectos y las confidencias.
Espera tu turno tristeza.
hoy no voy a recibirte.
3 comentarios:
La caja de las sorpresas -para subtítulo- y quizás usando una paráfrasis, la sorpresa eres tú.
De joven tenía este vicio mas acentuado. Con la edad ya he perdido facultades pero de vez en cuando salta la liebre. De shi vendrá la sorpresa, incluso para mi.
Acabo de leer tu poema, me gusta en la mañana, breve, hermoso. Enhorabuena. Un abrazo
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