Bernard Greenhouse y la música de violonchelo

Acaba de morir en EEUU y a la edad de 95 años uno de los mas célebres violonchelistas del siglo XX. Greenhouse, fundador del Beaux Arts Trio, grupo que llenó toda una época musical y lo hizo, además, rompiendo esquemas. Solista impecable le tocó vivir épocas, los años 40 y 50, en los que su instrumento no era suficientemente valorado. Toco esperar a los años 60 cuando la influencia de un hombre como Pau Casals logró elevar la influencia del violonchelo en las salas de concierto y en los estudios de grabación.

La alternativa de Greenhouse y la de sus colegas fue la de dar forma a un nuevo trio de solistas reputados- el grupo Beaux Arts- con el ánimo de consolidarse como una referencia propia en el campo de la música. Hasta entonces los trios y en general los pequeños grupos de cámara tenían una vida corta. Tan corta como el concierto al que se les reclamaba desde las orquestas, el disco que se grababa o la programación en la que se unían los talentos de solistas que muchas veces ni siquiera habían coincidido previamente en la misma orquesta. La gran era de las orquestas reclamaba por otra parte la presencia de sus titulares con mucha mas frecuencia que en la actualidad y además los grupos con mayor recorrido nacían dentro de estructuras casi familiares. Greenhouse y sus colegas, el violinista Daniel Guilet y el pianista Menahem Pressler, decidieron en 1955 dotarse de una estructura profesional propia que llamó la atención de los públicos y de los profesionales que no creian en ese modelo.

La verdad es que la cosa funcionó durante muchos años e incluso superó la vida profesional de los fundadores pues con otros componentes, exceptuando la presencia constante de Pressler, el grupo ha estado ofreciendo conciertos hasta el 2008.

Su repertorio lo han compuesto obras de Haydn, Mozart, Beethoven, Schubert, Dvorak y Shostakovich y otros muchos. En Spotify tienes una muy buena colección discográfica disponible.

En cuanto al video de cabecera que decir. Nada mas y nada menos que El cant dels ocells del maestro del propio Greenhouse, Pau Casals.